Recuerdo perfectamente el día que me bebí mi primer café…Me gustó tanto interés o tan poco que pude ver mi propia expresión de sacrificio. Yo tenía catorce años y me senté con mi amigo bebedor de café Mariana fue un momento realmente emocionante.
Corto, sin azúcar y sin cosecha se ha convertido en un ritual diario y tengo el placer de mi dosis de cafeína.
Esta torta huele mañana, como el café recién molido y tortas del horno…un comienzo más que perfecto para el día.
Coffee Cake 120 ml máquina / cafetera café 2 cucharaditas de polvo de café instantáneo 180 g de harina de trigo integral 6 g de levadura química ½ cucharadita de sal fina 112.5 g de mantequilla, ablandada 180 g azúcar ½ cucharadita de esencia de vainilla
2 huevos
Formación de hielo de café 15 ml máquina / cafetera café ¼ cucharadita de polvo de café instantáneo ½ cucharada de leche
130 g Azúcar en polvo (azúcar en polvo)
Para el bizcocho: Precaliente el horno a 180 º C. Engrasar con mantequilla y espolvorear con harina con una forma de evitar 22 cm de diámetro. Mezclar el café con el café en polvo y dejar enfriar por completo. Tamizar la harina con el polvo de hornear y la sal. Reservar. En un tazón, Batir la mantequilla con el azúcar hasta que esté cremosa. Agregue la vainilla y las yemas de huevo, uno por uno, batiendo bien entre cada adición. Baje la velocidad de la mezcladora a bajo y agregue la harina alternando con el café 3 veces (empezar y terminar con la harina). Batir las claras de huevo en la pasta y mezclar suavemente, con una espátula. Vierta la mezcla en el molde y hornear durante unos 30 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro salga seco.
Retirar del horno y dejar enfriar ligeramente en forma (cerca de 10 minutos) antes de desenformar.
Para el glaseado: Mezclar el café con el polvo de café y la leche. Añadir el azúcar en polvo y batir hasta que quede homogénea.
Verter sobre el pastel frío.
David Leite